Gorbeia la montaña de Bizkaia

El macizo calizo del Gorbeia levanta la espalda de Bizkaia hasta la llanura alavesa.

Es la montaña del territorio. La que cualquier persona que acceda por carretera desde la península ha de atravesar. Hoy en día, lo más habitual resulta utilizar la autopista. El punto de peaje indicado como Altube se encuentra en la ladera alavesa del Gorbeia. Y, por estas fechas, no resultará extraño que la cumbre aparezca encanecida por la nieve y el hielo. Desde ese punto, resta bajar suavemente hasta el Cantábrico

No se trata de un gran pico. Solo alcanza los 1.481 metros. Pero su impacto en el clima, el carácter y el imaginario del territorio es enorme.

Lo del clima lo comprobará usted si llega por carretera: niebla, lluvia persistente, nieve. Solo la nieve es propia del invierno. El resto puede suceder en cualquier fecha.

Tres cuartas partes de su superficie se encuentra cubierta de hayedos, robledales y pinares. Las bordas (majadas) que atestiguan el secular uso pastoril se alternan con casas de labranza, vestigios de molinos de agua y ferrerías, restos de neveros, huellas del trabajo de los carboneros, senderos para el paso de los caballos montaraces…

El Gorbeia es una montaña dura pero habitada desde tiempo inmemorial. Su cumbre sostiene desde hace más de un siglo una cruz levantada con hierro de Altos Hornos de Bizkaia. Pero, mucho antes, fue lugar elegido por los genios, femeninos y masculinos, de los bosques, las fuentes y las cuevas.

Y mucho más, como atestigua algún menhir que resiste.

Constituye una tradición en Bizkaia y el resto de Euskadi ascender hasta la cruz el 31 de diciembre, con mucha precaución, y el 31 de julio. Aunque todos los días se encuentran caminantes en sus trochas.

Municipios como Areatza, Orozko, Zeanuri, Ubidea, Otxandiano o Dima no pueden explicarse sin el Gorbeia.

Desde todos ellos parten los senderos que conducen a la cumbre.

EL CORAZÓN KÁRSTICO

Las 500 hectáreas del macizo kárstico de Itxina son un espectáculo. El agua ha diluído la caliza hasta formar cientos de oquedades, cuevas y grietas. En la parte nororiental del karst se halla el acceso más fácil al interior, a través del espectacular y mítico ‘Ojo de Atxular’, utilizado desde siempre por pastores y leñadores.

Esta es una zona para caminar en compañía de alguien que conozca muy bien el terreno; jamás con niebla o de noche.

SALDROPO

Al pie del monte de las Peñas de Atxuri se encuentra el humedal de Saldropo. Tres hectáreas de terrenos esponjosos con su punto de interpretación sobre la fauna, flora y la evolución. Se asienta sobre una antigua turbera, explotada hasta la segunda mitad del siglo XX.

La mejor forma de conocer el humedal es recorrer su ruta circular desde el parking en el sentido de las agujas del reloj.

PAGOMAKURRE

A Pagomakurre, en Areatza, se puede llegar en coche. Una suave pista conduce a las campas de Arraba y la ermita de Egiriñao. Desde ahí, paciencia hasta el collado de Aldaminoste.

A la derecha se eleva la cumbre del Gorbeia y su brillante cruz de acero. Hay que apretar los dientes para alcanzarla. Pero el paisaje merece la pena.

ACTIVIDADES

Existen rutas a caballo, bicicleta de montaña, espeleología o escalada, además de otras experiencias que es mejor consultar.